En la antigüedad, existían delantales que no se utilizaban para proteger la ropa o de salpicaduras de comida, sino que eran simplemente unos taparrabos. Este tipo de delantales se utilizan de maneras diferentes y no solo para la cocina, por ejemplo, en Sudáfrica lo utilizan para celebrar que las mujeres han llegado a la mayoría de edad.
¿Para que sirve un delantal?
Hablando de los delantales de cocina, estamos conscientes que su fin es exclusivamente para protegernos de ensuciar el uniforme de trabajo, por razones higiénicas de la cocina y para protegerlas del desgaste que ocasionarían algunas acciones que se realizan al hacer algún plato. Es normal que este instrumento sea parte del uniforme, sobre todo si estamos hablando de un local de hostelería, ya que lo primordial para ellos es la imagen que ofrecen los empleados.
En cuanto al componente con el que se hace el delantal, existen varios tipos de tela que se pueden utilizar. Para los delantales de cocina, la tela debe ser resistente al agua para proteger el uniforme, entonces son hechos con material PVC.
Hoy en día, los delantales no solo se limitan a proteger el uniforme principal, sino que también tienen algún propósito de diseño y decoración para que este implemento extra sea divertido y esté al día con las tendencias. Nombraremos algunas recomendaciones para que te diviertas con tus delantales:
– La cocina debe ser un lugar donde todos se diviertan, además de trabajar, así el resultado se reflejará en una deliciosa comida. Por eso, se recomienda que los delantales sean de colores brillantes y dinámicos, por ejemplo, los colores amarillo, azul, naranja, morado, serían ideales para darle ese toque alegre a una cocina.
– Si la cocina está compuesta de colores tierra o muy estructurados, puedes agregarle ese toque personal y único utilizando un delantal de diferentes colores, uno que contemple una paleta de colores verdes, naturales para que el espacio tome vida.
– Si tienen una cocina con colores alegres, no es motivo para tener un delantal aburrido, al contrario, esto da pie a que el delantal pueda combinar con la paleta de colores de las paredes o piso. En la combinación también puede estar la armonía.
– Para combinar con colores rojos y vivos en las paredes, podemos aplicar un delantal un poco más clásico, pero no aburrido, puede ser en tonos tranquilos, rosa, beige y tonos que den calma.
– Para una cocina con muchos tonos de grises, podemos darle un toque chic y de movimiento con delantales en tonos pasteles, así le damos la armonía que buscamos sin salir del tono correcto de la paleta de colores.
– También existen delantales divertidos que solo dependerán de la personalidad de cada quien, con estructuras, imágenes y formas que tendrán vida gracias a una personalidad que combine y si el jefe de la cocina se los permite. Es importante que estos detalles cambiantes sean consultados y permitido para no ocasionar problemas de ningún tipo.
En 1950, los delantales de cocina eran utilizados para saber que ya la guerra había terminado, ya que todas las señoras estaban en su labor de amas de casa, lo que proyectaba el delantal de cocina. Este era un símbolo propio de estas señoras de sus casas. En esta década, también los hombres de la casa los utilizaban en la común barbacoa de los fines de semana.
A medida que pasaba el tiempo, el estereotipo del delantal fue cambiando, ya no eran solo para las amas de casa, sino que eran para cualquier persona. Sus diseños eran menos femeninos y más unisex.
En los establecimientos de hostelería, los delantales forman parte del uniforme, aunque estos estén hechos para proteger al resto de la vestimenta de ensuciarse o mancharse, no significa que estos estarán gastados y feos.
También debemos saber cómo cuidar el delantal, que también pertenece a la ropa. Para la cocina, los materiales utilizados para confeccionar delantales son:
- Vinilo
- Tela
- Desechables.
Estos últimos, son desechados una vez que se utilizan, por eso no necesitan mayor cuidado al momento de utilizarlos.
Recomendaciones a la hora de cuidar un delantal de cocina:
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Delantales hechos con material de vinilo:
Ya que su material es resistente al agua, son los más recomendables de tener y de usar. Además son los más fáciles de mantener, ya que no necesitan de lavados especiales o lavadoras y secadoras, con una servilleta, papel, agua, jabón y agua; estamos listos para mantener nuestro delantal en excelentes condiciones. Este material es, generalmente, plástico o muy parecido.
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Delantales hechos con tela:
La mayoría de las cocinas cuentan con sus propias alianzas de empresas que se encargan de la limpieza de este tipo de implementos, al igual que manteles, servilletas, etc. Con la tela se absorberán todo tipo de salpicaduras, restos de alimentos y bebidas, ya que su contextura logra retener todo esto.
Es posible que para este tipo de manchas se utilicen los blanqueadores, que son químicos fuertes y a lo largo de su uso, la tela perderá textura y romperán todas las fibras que la conforman. Esto significaría más gastos para la cocina.
En caso de que ya los delantales estén manchados, entonces debemos mantenerlos en remojo unos 20 minutos con agua y jabón, luego puedes lavarlas en la lavadora como normalmente lo hacer. De esta manera será más fácil que las manchas salgan.
Antes de invertir en una cantidad de delantales de telas, debemos asegurarnos que sea de muy buena calidad, ya que son las que más se manchan. A lo largo del tiempo, los delantales se desgastan y pueden presentar manchas que no se quitarán de ninguna forma. Por eso se debe cuidar su lavado, mantenimiento y la calidad de la tela.
Los delantales forman parte de las prendas de vestir, también es importante que se mantengan de manera presentable y libres de cualquier tipo de manchas. Para la empresa, será importante que su personal esté impecable en caso de que cualquier cliente quiera hablar con alguno de ellos.
Recuerda: ¡los delantales de cocina son lo primero que ven!