Ropa antiestática, EPI imprescindible

¿Cuándo es necesaria la ropa antiestática?

Hay sectores de la industria donde hay un importante nivel de carga electrostática, que puede suponer un enorme riesgo si se combina con la presencia de materiales inflamables o una atmósfera especialmente explosiva por estar compuesta de gases, vapores disolventes, polvos finos combustibles o gran cantidad de oxígeno. Un trabajador puede generar cargas eléctricas con cualquier movimiento -caminar, manipular plásticos, carga y descarga de materiales, etc.- y también puede cargarse electrostáticamente por su cercanía a objetos que presenten dicha carga, como una cinta transportadora por ejemplo.

El problema es que la carga electrostática puede liberarse en forma de chispas ante cualquier contacto con un objeto conductor y provocar un incendio si se encuentra en una atmósfera potencialmente explosiva como la que comentábamos en el párrafo anterior.

Para evitar estos riesgos en la medida de lo posible, se debe facilitar a los trabajadores ropa antiestática, tal y como recoge el requisito 2.6 del Real Decreto 1407/1992 y la norma técnica UNE-EN 1149-5.

Características de la ropa antiestática

La ropa antiestática es aquella que no retiene la carga electrostática y la disipa a tierra.

Para asegurar una protección total y correcta, la ropa antiestática debería cubrir de forma completa la ropa que se lleve debajo y no desabrocharse en ningún momento mientras exista riesgo.

Además de forma complementaria, es interesante que la prenda tenga también propiedades ignífugas, ya que el hecho de que no sea la causante del incendio no evita que éste pueda producirse por otras circunstancias dado que estamos hablando de entornos de riesgo.

Asimismo ha de complementarse la ropa antiestática con guantes y calzado de las mismas características.

 

 

Para más información, podéis consultar esta nota técnica del Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo.